El Colegio de Veterinarios de Valladolid celebró el pasado viernes 4 de octubre en su sede el acto conmemorativo con motivo de la fiesta de su patrón, San Francisco de Asís. Además de dar la  la bienvenida a los nuevos titulados que se incorporan al mismo para ejercer la profesión –dieciséis mujeres y cuatro hombres–,  el anterior presidente y actual responsable de la Organización Colegial Veterinaria, Luis Alberto Calvo Sáez, recibió el nombramiento formal de presidente de honor.

La sesión contó con la presencia del viceconsejero de Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León, Jorge Llorente; del secretario general de la Consejería de Cultura, Gregorio Muñoz Abad, y del presidente de la Academia de Ciencias Veterinarias de Castilla y León, el catedrático Elías Rodríguez Ferri, junto a otros responsables de la Administración, de diferentes colegios profesionales y numerosos colegiados.

El presidente del Colegio, Rufino Álamo, señaló que la fiesta de la profesión es el momento adecuado para reconocer la variada actividad derivada de la ciencia veterinaria, “siempre enfocada a las demandas sociales de cada época, con especial atención a la seguridad alimentaria, el bienestar y la sanidad animal, el cuidado de los animales de compañía y la salud pública, siempre con un claro carácter preventivo”.

Al dirigirse a los nuevos colegiados, Álamo puso especial énfasis en los retos a los que deben enfrentarse los jóvenes titulados en el ejercicio diario de su trabajo, “como la influencia del cambio climático en la ganadería, la mejora de la seguridad alimentaria y su capacidad de respuesta a los nuevos gustos gastronómicos, o los riesgos sanitarios que conlleva la globalización, con una facilidad mayor de propagación de ciertas enfermedades por la rapidez de los desplazamientos”.

Evolución de la veterinaria y valores humanos

El reconocimiento expreso de Luis Alberto Calvo como presidente de honor, según precisó Rufino Álamo, obedece a su “compromiso, dedicación e impulso al Colegio de Valladolid”, y a una trayectoria profesional preocupada por la constante evolución de la veterinaria, los valores humanos y la vocación artística, “sin olvidar su capacidad de liderazgo en la organización profesional nacional”.

El homenajeado agradeció este gesto como vallisoletano y animó a los veterinarios a consolidar su compromiso con el concepto “one health”, además de destacar la urgencia de abordar “todos juntos” los problemas actuales de la profesión, desde una fase inicial de estudio hasta su posterior resolución.

Por último, el Colegio distinguió a Victoriano Andrés Nieto, perteneciente al Cuerpo de Veterinarios Titulares, que estuvo destinado en el Servicio Provincial de Ganadería –también en la localidad vallisoletana de Montemayor de Pililla- y miembro de la organización desde 1970, con la insignia de oro por su medio siglo de pertenencia.

El programa festivo, que ha incluido un torneo de pádel, una cena de hermandad y actividades infantiles, continuará mañana domingo con la celebración de una misa a las 13 horas en la parroquia de los padres franciscanos, situada en el Paseo de Zorrilla, con un recuerdo especial a los tres colegiados fallecidos durante el último año: Juan de la Peña, José María Alfageme y Juan José Santos. El Colegio está integrado en la actualidad por 400 veterinarios que ejercen la profesión en sus distintas vertientes.