El peligro de los perros encerrados en el coche
La Policía Nacional de Jerez alerta en una campaña titulada “No dejes que tu perro se cueza” sobre el peligro de dejar a los perros encerrados en los coches en ausencia de los dueños, acción que puede llegar a ser considerada ilícito penal.
El artículo 337 del Código Penal establece que el maltrato injustificado a un animal doméstico o amansado causándole la muerte o lesiones que menoscaben gravemente su salud, será castigado con la pena de tres meses a un año de prisión e inhabilitación especial de uno a tres años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales. Asimismo, podrá ser castigada con una pena de multa de uno a seis meses la persona que ponga en peligro la vida o integridad del animal.
Hay que tener en cuenta que los malos tratos a los animales están castigados en la legislación de las distintas comunidades autónomas. En Andalucía, por ejemplo, el abandono y el maltrato conlleva multas de entre 2.001 a 30.000 euros. Las faltas menos graves tienen sanciones de entre 501 a 2.000 euros; y las leves, de 75 a 500.
En verano hay que extremar la precaución con los perros que presentan características especiales por su razo. En este sentido, son más frágiles las razas braquicéfalas, perros chatos como el bulldog, el carlino o el pequinés, que tienen aún más dificultades en regular su temperatura y son hipersensibles a los golpes de calor; así como las razas nórdicas, huskies, malamutes, samoyedos y san bernardos, entre otros, que sufren enormemente en los días de calor porque fueron criados para vivir en la nieve.
El Diario de Jerez se hace eco de que la Policía Nacional recuerda que nunca se debe de dejar a un animal dentro de un espacio tan reducido como el maletero, sin apenas oxígeno ni ningún tipo de corriente o ventilación. En el caso de los trasportines, muchos están hechos de plástico o de telas plásticas que no transpiran y concentran aún más el calor. Si además de estar dentro del coche, el perro está metido en su trasportín, la temperatura aumenta. El calor que desprende el perro se va reconcentrando dentro del trasportín y ello agrava la situación.